Salsas más ligeras

abr 16

La más humilde verdura a la plancha puede convertirse en una bomba de calorías en función de la salsa que se le añada.

Un poco de mahonesa en los espárragos, más aceite en la ensalada, salsa de queso en la carne... ¡Y esa bechamel en las espinacas!. Si eres de las que pierde el sentido por mojar un poco de pan, estás de enhorabuena. Y si has decidido cuidarte más... ya no tendrás que renunciar a ellas. Apúntate estos trucos y redescubre el placer de salsear.

  • Ensaladas ricas, ricas: el secreto está en preparar el aliño en un recipiente aparte y servirlo después a cucharaditas. Añade una parte de agua, una parte de aceite y una parte de vinagre balsámico, especias y una pizca de sal. Remueve y... listo. Puedes ir reduciendo poco a poco la cantidad de aceite y añadir otros sabores (zumo de limón, de naranja, miel...)
  • Pon un yogur en tu vida: los platos de verduras resultan deliciosos con salsa de yogur a la que puedes añadir cebollitas y huevo duro picados.
  • Mahonesa más ligera: usa solo 100 o 150 ml de aceite y el resto sustitúyelo por un yogur de limón.
  • Salsa rosa: haz una mahonesa caser ligera y añádele una cucharadita de ketchup, una de mostaza, un poco de brandy y unas gotas de tabasco. Ideal para ensaladas y pescados
  • "Yogurnesa": puedes seguir disfrutando la mahonesa pero cambiando los huevos por yogur. Para ello pon un yogur natural, salpimiéntalo y mézclalo con la batidora. Mientras añade aceite de oliva poco a poco hasta que emulsione. Esta salsa yogurnesa es muy suave y resulta deliciosa en pescados y verduras
  • Bechamel: sus ingredientes a pesar de ser "humildes" y nada rebuscados aportan no pocas calorías, por lo que conviene descubrir nuevas formas de disfrutar esta salsa que tan usada es en nuestra cocina

    • light: calienta la leche descremada en una cacerola y vierte lentamente fécula de maíz disuelta previamente en un poquito de leche fría. Sin parar de remover pon la cacerola al fuego y sigue removiendo hasta que espese. Baja el fuego y continúaa removiendo unos 10 minutos. Condimenta con sal, nuez moscada y pimienta.
    • si la quieres más suave y digestiva, puedes usar leche de soja o de avena
    • puedes sustituir la mantequilla por margarina ligera para que quede más suave
    • muy ligera: leche desnatada y quesitos light en lugar de mantequilla. Lograrás una salsa igual de sabrosa y densa, que incluso te servirá para hacer deliciosas croquetas caseras.
    • en el microondas: en un bol bate con las varillas eléctricas 1/4 litro de leche, una cucharada de harina, sal y pimienta y una pizca de nuez moscada. Pon 2 segundos en el microondas, retira, bate de nuevo e introduce un minuto más. Una vez fuera, añade una cucharada de mantequilla a temperatura ambiente y bate de nuevo

Entrada más reciente Entrada antigua Inicio

Popular Posts

Archivo del Blog

Con la tecnología de Blogger.

Recent Comments