No picar y superar el hambre irreal
Si a cualquiera de nosotros nos preguntaran si picamos mucho entre horas responderíamos, seguramente, que no. Es normal porque el sentimiento de culpa va ligado a ese picoteo. ¡Y más cuando se es mujer! Sin embargo, son muchos los que suman centenares de calorías de más casi a diario sin darse cuenta. Y si no, toma nota de este dato: una sola loncha de queso manchego (esa que cogemos de la nevera en un momento de debilidad y que piensas que ni siquiera puede considerarse "picoteo") te suma 225 calorías. Muchísimas, teniendo en cuenta que tu dieta debería rondar las 1.500-1.800 calorías diarias si te sobra peso. ¿Y qué puedes hacer? ¿Estar constantemente alerta para no caer en tentación alguna?. ¡Ni se te ocurra! Cuanto más te martirices y más pienses en reprimirte, más momentos de debilidad tendrás. ¡Cosas de la mente! Por eso, vamos a tratar que sea muchísimo más fácil.
La compra anti-picoteo que te evita sorpresas con la báscula
Hacer la compra se ha convertido en todo un arte. Hoy en día hay tantas posibilidades donde elegir y estamos tan influenciados por el bombardeo de publicidad, que es fácil dudar sobre qué es lo que más conviene y qué se debe dejar en la estanteria.
Cuantos más productos calóricos tengas en tu despensa, más posibilidades hay de que los tomes.
Lo sabroso "nos pierde". Es lo que más determina nuestras compras. Así que es lógico que nos decantemos por snacks (patatas fritas, ganchitos, ...) que suelen tener un sabor intensísimo (no siempre natural)... pero también un valor calórico capaz de engordar a cualquiera. Al menos debes ser consciente leyendo las etiquetas
Existen alternativas sanas. Por mucho que te hayas acostumbrado a picar entre horas, siempre puedes optar por productos que "alegren" tu estómago en ese momento y no disparen las calorías que tomas. En esta lista seguro que puedes encontrar más alternativas a ese picoteo tan calórico que acaba dejándote "mal sabor de boca" y peor conciencia.
Si te apetece
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Mejor tener en casa
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Recuerda
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Patatas “de bolsa”
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Su versión light (40% menos de grasa) o crujientes chips vegetales. Horneados,
no fritos – comprueba la etiqueta
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Si haces tú los chips, corta rodajas finísimas de frutas o verduras,
cúbrelas con poco aceite y mételas en el microondas a 800W unos minutos
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Galletitas saladas
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Unos palitos con semillas o unos biscotes, preferiblemente integrales.
Te aportan hidratos de carbono y fibra
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Escógelos con poca sal (menos de 100g/porción) y aditivos. Si estos
elementos encabezan tu lista de ingredientes en la etiqueta, evítalos.
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Bollería industrial
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Un bizcocho básico (sin nata, crema…) elaborado artesanalmente. Puedes
encargarlo “a tu medida” en una panadería industrial
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Las grasas “trans” de magdalenas o donuts disparan el colesterol “malo”.
Un bizcocho de harina integral aporta mucha más fibra.
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Cacahuetes salados
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Nueces, almendras o pistachos naturales… Está comprobado que son
buenísimos para la salud de tu corazón por sus ácidos grasos insaturados.
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4 nueces o 10 almendras o pistachos (sin piel) calman tu apetito sin
engordar. ¿El truco? Mastícalos bien y bebe agua después
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Chorizo/
Salchichón
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Jamón Ibérico, con grasas insaturadas y, por tanto, más sanas. Al comerlo
con las manos, el cerebro queda más saciado
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La versión ibérica de los embutidos daña menos las arterias. Permitete
comprar solo este tipo, aunque salga más caro “ahorras en trastornos.
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Queso Manchego
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Queso curado de cabra. La leche de este animal es bastante menos grasa
que la de oveja o la de vaca y da quesos de intenso sabor
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El contenido de cualquier queso no debe superar el 25% de materia grasa
si quieres que no te engorde demasiado
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Chocolate
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Una tableta de chocolate negro con un mínimo de 70% de cacao. Compara
etiquetas y escoge los de menos azúcar y grasa
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Es cardiosaludable si te limitas a una onza diaria sin leche ni frutos
secos. Tenlo envuelto en la nevera ya troceado en onzas.
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Gominolas
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Frutas naturales desecadas, como los orejones (de melocotón). Las de
fresa parecen tal cual fresitas de gominola
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Tienen una textura parecida y un sabor dulce pero sin ninguna grasa.
Además, aportan a tu cuerpo los nutrientes de las frutas
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